¿CRISIS? PARA ALGUNOS.

Prometo que lo intento. Pero no lo consigo. A unas semanas de las elecciones generales en España (20N), con lo mal que lo estamos pasando, con los recortes que nos hacen soportar, con la impunidad con la que nos están robando. Esto me parece una dictadura encubierta. Un barco sin timonel en medio de una tormenta descontrolada. Todas las prohibiciones posibles, no podemos correr y se venden coches rapidísimos y nos cobran un riñón por circular por autopistas tercermundistas y se quedan con parte del otro, cuando paramos a repostar. No se puede beber. Pero tenemos el país que se vende al extranjero, como uno de los más permisivos con el alcohol y el más barato de Europa con ese producto. Junto a que no se educa a la juventud, seriamente, sobre lo que produce el alcohol. No se puede fumar. Pero el tabaco se puede vender en más lugares que hace un año, cuando se permitía hacerlo, por aquello de que sea más fácil hacerse con él. Pero eso, sinceramente, no es lo que me preocupa. Me preocupa que se hagan recortes en sanidad y en educación, lo último que se debería quitar, es lo primero. Pero nadie ha propuesto quitar chupones de “berra”. Y ya me perdonarán, pero la “berra” se está quedando sin leche. A unas semanas de las elecciones generales de este país, nadie ha propuesto reducir políticos o instituciones públicas. Las listas de representantes al congreso serán los mismos. No un 20% menos, ni un 10%. Los mismos. Y,¿ para qué? Para no perder mama de la “berra”. Para que el bolsillo de unos se llene a la vez que se vacían los estómagos de otros. Para que todo siga el curso de los ladrones. Porque, el político de aquí, es el que raparte y reparte, y a parte de lo que sigue, mientras va repartiendo vamos cogiendo. Para que no nos pase otro delante.

Lo prometo, yo sí que estoy indignado, molesto con mucho de lo que veo. Que esto tiene que pegar una torta descomunal. Las cajas y bancos no tienen un euro y hacen de vendedores de mantas, para sacarse de encima, todo lo que no les pagan. Por su mala gestión. La justicia de este país es de sala de juegos, aquí los malotes tienen su paraíso. Si sale uno que lo quiere hacer medianamente bien, lo callan, para que no deje mal al resto de los incompetentes jurídicos. Los políticos son unos corruptos, que anteponen sus personas a las personas que los pusieron en su silla. Intocables ante los juristas de antes, hagan la gestión que hagan. Y más y más incoherencias. Ya hace años que esto se veía venir, juro que hace más de seis años que vengo diciendo, a mis allegados. Todos éramos ricos estando endeudados, y ahora hay gente que no tiene ni que comer. Y los señores, que en teoría debían interferir en que aquello no sucediera, vivían en los mundos de “Yupí” pensando que aquello sería infinito. Lo más lamentable de todo es que, gracias a esa asquerosa justicia que tenemos, en que somos más papistas que el Papa y que todo lo que no nos gusta lo tachamos de anticonstitucional, tendremos a los creadores políticos, de este desaguisado, con sueldos vitalicios, despachos y chofer en la puerta. Como si lo que está pasando no fuera con ellos. Mientras los plebeyos, como nosotros, a seguir pagando sus despilfarros de reyes.